Concentración de «botellas vacías»: en el FONAVI de Seguí y Rouillón reclaman por el derecho al agua

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Ayer por la mañana, vecinas y vecinos del barrio FONAVI, de Seguí y Rouillón, de la zona oeste de Rosario, concentraron frente al Concejo Municipal en una actividad que llamaron de las «botellas vacías». Es que hace más de 45 días que no tienen acceso a un derecho básico como es el agua corriente y potable. La acción se enmarca dentro de una serie de movilizaciones y reclamos que organizados en asamblea vienen realizando a Aguas Provinciales, al Ente Regulador de Servicios Sanitarios (EnReSS), al gobierno provincial y municipal. La situación no es nueva, pero aseguran que en los últimos meses, empeoró. La solución: «una obra seria», afirman. El gobierno provincial dice no tener presupuesto, que Nación recortó las partidas para la obra pública. Pero algo no cierra, el gobernador Maximiliano Pullaro, está invirtiendo 148 mil millones de pesos para construir según él, en «4 años la misma cantidad de celdas (carcelarias) que se hicieron en 100 años. A la concentración también asistieron vecinos de Cabín 9 y de un barrio cercano «camino del indio» que afrontan la misma problemática, el Frente de Jubilados en Lucha (FREJEL) y la organización piquetera Cuba MTR. Durante la acción dialogamos con los y las vecinas. Por Estefania Gonzalez, ANRed.

Ayer a las 10, con carteles y botellas vacías, vecinos y vecinas del FONAVI, ubicado en Seguí y Roullón de la zona oeste de Rosario, estuvieron frente al Concejo Municipal para reclamar una vez más el acceso al agua corriente y potable.

Hace más de 45 días que no tienen agua. La situación no es nueva, pero afirman, que empeoró. Así contó Claudia, vecina del barrio: » Hace 39 años que vivo ahí. Siempre tuvimos problema con el agua, al principio con la luz también. Estamos muy angustiados porque salimos a trabajar, volvemos y no tenemos agua. Nos levantamos a las 6 todos los días, salen unas gotas, aprovechamos a llenar ollas, hasta las 9 había agua. Ahora hace más de un mes que definitivamente no tenemos. Y amplió sobre cómo afecta a su situación familiar: » Vivo con mi marido y dos hijos, uno de ellos tiene autismo. Es lo que más me preocupa porque él no se puede acostumbrar a cómo estamos viviendo y hay momentos en que le agarra crisis.»

La pregunta a cómo manejan la situación, se responde con mucho padecimiento, pero también con ayuda entre los vecinos y familiares, mientras continúan con los reclamos a los responsables. Dice Claudia: » Llevamos, traemos bidones de agua, compramos para tomar. Tengo que ir a la casa de mi mamá a lavar ropa. Los chicos se bañan de familiares, no se puede estar así. Estoy en el tercer piso, en lo que se conoce como el FONAVI Verde, a todos ahí no nos sale una gota de agua.» Y agregó: » Ya fuimos al EnReSS, al Defensor del Pueblo, a Aguas, reclamos de todo tipo y no hay solución, estamos desesperados. Hacen arreglos, pero son parches, seguimos sin una gota. »

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Barrios «periféricos» y barrios » inmobiliarios»

Mario y su hermana también son vecinos del FONAVI. Mario afirma que la situación que atraviesan es también la de otros barrios. Para él, La ciudad de Rosario, como todas, se divide, o la segregan, en barrios «periféricos» y barrios «inmobiliarios». Estos últimos son a los que nunca le falta el agua: » esos barrios inmobiliarios que le interesan al gobernador Pullaro y al intendente Javkin, en ellos, sí invierten en obras de millones y millones. A los que vivimos en los barrios populares, no nos conocen, ni quieren conocernos y nos ignoran por completo y por eso tenemos los problemas que tenemos. Venimos entonces acá para que nos vean, que nos escuchen los concejales. Nos dijeron que no son » representantes», sino funcionarios. Funcionarios de qué? Evidentemente funcionarios de quienes nos reprimen y manejan los gobiernos antipopulares que tenemos. En esta lucha debemos sumar a todos los barrios olvidados de Rosario», dijo ayer Mario en el megáfono.

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Reclamos, burocracia, organización: vivir sin agua

En diálogo con Mario, contó todos los reclamos que vienen realizando y cómo se organizan en asamblea. «Hace un mes que estamos realizando cortes de calle en Roullón y Seguí. Durante 15 días estuvimos cortando de lunes a viernes a las 19. Funcionamos como asamblea y ahí decimos las acciones. Juntar firmas, ir a Aguas Provinciales, al Ente Regulador, venir al Concejo, pedir audiencia. Acá al Concejo ya vinimos, volvemos porque en primera instancia nos dijeron que no podían hacer nada. Continuamos con el reclamo, la visibilización. Vivir ya 45 días sin agua es imposible. En segundo y tercer piso no sale ni una gota de agua. En el primero sale algo pero en determinadas y escasas horas. Son a las que estamos atentos para cargar. Pero hay que acarriar agua de planta baja al tercero y en estos barrios la mayoría ya son personas mayores y nos ayudamos entre vecinos.»

Y agregó sobre cómo la falta de acceso al agua potable y corriente afecta a otros derechos como la salud y la educación, detalló: «Todo esto trae problemas de higiene, de alimentación, deshidratación. La salita del Centro de Salud tuvo que cerrar dos días por falta de agua. Tenemos dos escuelas, pero están al lado del tanque y son planta baja y eso les garantiza tener algo de agua. Pero las más lejos del tanque, han reducido horarios de clases porque el agua no les llega.»

La solución: «un obra seria»

» Esto se soluciona con un plan de obra real», expresa Mario. » Renovar todas las cañerías, verificar el estado del tanque, ver si no hace falta poner otro más, porque el que está no sólo provee al FONAVI, sino también a los barrios que se han construido alrededor, el oeste se ha extendido. Cuando se inauguró el FONAVI no había nada, ahora está el barrio qom, con múltiples problemáticas, el barrio Hipotecario, la Lagunita, algunos hechos por el Estado, otros no.», relata.

Y afirma: «Deben proveer de agua a todo Rosario, saben que tienen que agrandar la planta potabilizadora. Pero nos dicen que no hay plata y que esa obra quedó inclusa por cortarla Nación. Pullaro dice que no tiene plata pero si tiene para inaugurar cárceles, nueva jefatura de policía que cuesta millones. Sí hacen obras, en lo que llamo los barrios inmobiliarios.»

Sobre las respuestas que obtuvieron Mario contó: «En Aguas Provinciales nos prometieron una reunión y nos dijeron que los reclamos son individuales y no grupales. Por eso iniciamos una gestión con el EnReSS, acá en el Concejo nos reunimos la semana pasada y resultado, nada. Nos dicen que es problema de la provincia, le pedimos que acompañen con la firma en los petitorios pero nos dijeron que no, que como funcionarios no pueden firmar.»

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Cabin 9 y Camino del Indio: el agua es salada

También acompañaron la manifestación vecinos y vecinas de Cabin 9, un barrio en el límite entre Rosario y Pérez. Cercano por ahí cerca viven unas cientas de familias en un barrio de calles sin nombres, quienes lo habitan lo conocen por Camino del Indio. Allí vive Rosa, que se acercó ayer. » En mi barrio tampoco tenemos agua potable, ni servicios básicos, hoy venimos por el agua, pero nos falta todo. Teníamos un tanque y lo sacaron. Sólo tenemos agua de pozo de varios vecinos pero es salada y tomando eso nos salen piedras», relató.

Cómo afrontan la situación? Rosa cuenta: » Vamos a la parada del colectivo 145, donde hay agua potable. Significa caminar desde donde yo vivo 10 cuadras para traer agua potable para tomar. El asunto es que que muchos vecinos son mayores no pueden hacer ese recorrido o lo hacen con mucha dificultad. Hay muchos chicos y ahora encima se viene el calor. Necesitamos al menos que repongan el tanque.»

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Mauro y Luisa, acompañan a Rosa. Son del Centro Social Cabin 9 desde donde se organizan con vecinos para afrontar las múltiples problemáticas del barrio. «La situación es histórica y en muchos barrios de Rosario. En Cabin 9, barrio de muchos años y de muchos habitantes, entre 15 y 20 mil, no tenemos agua potable desde sus origenes. Por eso hace muchos años nos estamos organizando con los vecinos, creando la lucha por el agua potable en el barrio. Hemos alcanzado algunas conquistas, como la colocación de una media sombra porque en verano hacemos largas colas para cargar agua, también un censo a personas mayores para que la municipalidad les provea agua. La realidad que vemos es que no hay respuestas, ni interés, mientras vemos que si hay presupuestos para otras cosas. Son muchos los problemas que tenemos además del agua, pavimentación, alumbrado público, ni hablar el tema del hambre. Es urgente unificar las luchas y articular entre los barrios.» expresó Mauro.<https://www.anred.org/wp-content/up...>

Jubilados presente

El Frejel, Frente de Jubilados en Lucha, asistieron también a la manifestación de las «botellas vacías». No la pasan mejor y también son vecinos de los barrios «olvidados» de Rosario. Al megáfono, uno de ellos intervino: » en mi barrio no tenemos agua corriente, no tenemos presión. Hemos hecho miles de reclamos, la cisterna no alcanza porque el barrio se ha extendido. Sectores del barrio, prácticamente, no tenemos agua. Invoco a la unidad, organizarnos en el barrio. No sólo es el problema del agua, sino también del hambre. Hay cada vez más personas desocupadas y que no pueden comprar un bidón de agua para hidratarse.»

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Otro papelito más, continuar en las calles

En el Concejo se entregó un petitorio de reunión urgente y el pedido de que se sesione por la problemática del agua en los barrios. El resultado: la promesa del armado de una comisión.

Así se cerró la jornada, con un recibido, otro papelito que Sebastían Romero suma a una carpeta que sostiene en sus manos, donde la asamblea junta a modo de expediente las presentaciones que han hecho en distintos organismos.

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Seba es el mismo que fue criminalizado y perseguido en 2017 por participar de la masiva manifestación contra la reforma previsional del entonces gobierno de Mauricio Macri. Hoy continúa organizado, en asamblea. El FONAVI de Seguí y Roullón es su barrio, sus habitantes, sus vecinos.

» Es muy importante el faltante de obras que hay en Rosario, estamos acá porque tenemos derecho a vivir dignamente como seres humanos, tener acceso al agua potable como algo principal. Pedimos que el Concejo que hoy sesiona, nos de una reunión formal para poder presentar el reclamo. Estamos esperamos la reunión con el municipio, la gobernación y el distrito oeste. No hay fechas y hace más de un mes que no tenemos agua», expresó.

El reclamo continúa, el ánimo no decae, la asamblea decidirá los pasos siguientes.